sábado, 20 de septiembre de 2008

20 de Septiembre (II) - Ah del castillo!

La primera mitad del día la he pasado en Himeji. Llegué a la ciudad a eso de las nueve de la mañana, dejando las cosas en la consigna (para mis dos mochilas unos 600 yenes). Fui como siempre a la oficina de información y me dieron planos y me hicieron saber que hay guías voluntarios para enseñar el castillo.

Pues nada, ahí que me planté yo a preguntar por los guías. Me asignaron un señor mayor ya jubilado, que había estado en España por negocios hace ya tiempo... majísimo el tío... me dijo el pobre que la visita iba a durar unas dos horas y que si tenía tiempo... no me conocía. La visita duró TRES horas, le estuve preguntando hasta que le sangraron las orejas, para uno que pillo que me entiende le he acribillado. Me ha contado todos los entresijos del castillo, con sus batallitas, su historia (aquí, por cierto, he agradecido todos los libros que me he leído antes de llegar... el conocimiento finalmente encaja como los eslabones de una cadena), sus leyendas y, en fin, tantísimas cosas que si yo hubiera visto el castillo solo no me hubiera enterado ni de una décima parte.

El castillo es fabuloso, una genialidad de diseño estratégico y defensivo, cuya historia se mezcla con la del japón medieval. El mismo Hideyoshi estuvo en él (este hombre fue el que unificó el japón medieval) y ha tenido príncipes y princesas, apoderados e intrigas, y estuvo en un tris de ser echado abajo durante la restauracion Meiji. Es imprescindible su visita y además recomiendo solicitar un guía voluntario.

A la salida invité a comer a Ken pero amablemente rehusó. Tengo su tarjeta y si puedo le enviaré jamón de nuestra tierra, que recuerda con nostalgia. Antes de irme a Mijayima compré en la librería de la estación el Shogun de James Clavel. He tenido que venir a Japon a encontrarlo... aunque en inglés, claro.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

En la Expo de Zaragoza, había un voluntario.... ¡de 104 años! Si es que la voluntad llega a dónde se quiere. Habrá que hacer un paquete de jamón al vacio para Japón aunque no hay que hacerle demasiada publicidad a nuestro producto "estrella"

Isma dijo...

Pues si, la verdad es que no se como funcionara el tema de la aduana para exportar productos alimenticios, pero tendre que informarme.